lunes, 27 de marzo de 2017
Adiós a los cachivaches ...por Rosa Belmonte
En un episodio de 'El ala oeste', Toby Ziegler trabaja con el ordenador en un avión. «Necesito que lo apague, señor. Interfiere con nuestro sistema de navegación», le dice la azafata. Y él: «¿Saben que eso suena ridículo, verdad?». También le avisan sobre el teléfono. Toby se cabrea: «Estamos volando en un Lockheed Eagle series L-1011 que lleva un transpondedor Sim-5. ¿Me está diciendo que puedo confundir eso con algo que he comprado en Radio Shack?». Un desahogo jaleado por el espectador que no sirve para nada porque hace muchos años que, en favor de la seguridad, perdimos como borregos los derechos civiles al entrar en los aeropuertos. Ahora EE UU y Gran Bretaña van a prohibir en algunos vuelos el transporte en cabina de aparatos que superen las medidas de un smartphone. Habrá que aprovechar mientras nos dejen el móvil, que sirve para lo mismo que los otros trastos. Un día lo prohibirán todo. Pero un día no tuvimos nada de eso.
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