Floyd Mayweather y Conor McGregor llevan días haciendo el payaso para promocionar su combate del 26 de agosto en Las Vegas. Puigdemont también hace el payaso echando gente y rodeándose de palmeros del independentismo. Puigdemont y Rajoy no se gritan bravuconadas a la cara. Ni se hacen gestos obscenos. Ni se lanzan dinero. Y ninguno dice ser negro de cintura para abajo (aunque lo piensen). En uno de los apuntes inéditos de Pla que Destino va publicar en noviembre se lee: «El ideal consiste en hacerse todas las ilusiones posibles y no creer en ninguna». Quizá en eso está Puigdemont. Desde luego, si el mundo cambia por lo que se hace y no por lo que se dice, Puigdemont lleva ventaja. El día del primer encuentro promocional (y mamarracho) entre los dos boxeadores, McGregor llevaba un traje oscuro del mil rayas. Pero no eran rayas. Eran líneas donde se repetía 'Fuck you'. Todavía no tengo claro si ese traje lo lleva Rajoy o Puigdemont.
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